15 noviembre 2008
Esta película ya la vi. En un abrir y
cerrar de ojos, este joven equipo de
BA.NA.DE., aplicó la formula letal.
A los 5 minutos de iniciado el partido
ganaba 2 a 0 y repetía la historia
jugada en Martínez.
Desconcierto. Los fantasmas de
aquella última fecha del Torneo
Apertura 08, empezaron a recorrer
la geografía de Pasteleros.
Los primeros gritos surgieron desde
el banco local, pedían
desesperadamente, que ante la
adversidad, el equipo no perdiera
el orden.
Si a eso, SAVIO le sumaba
vergüenza y amor propio, las cosas
se podían dar vuelta.
Y así fue. Los de Lugano, mostraron
oficio para cambiar el rumbo.
La pelota al piso, circulación y
agresividad, un sello grabado a
fuego que tiene el equipo,
comenzó a funcionar.
"Pacha" ROMERO y
Hernán FERRARI se hicieron cargo
del armado del juego. Adrián “evo”
LÓPEZ se mostraba activo
buscando dar la puntada final.
El "tano" CURIALE, intermitente, aportaba algo de juego por derecha, Luife SILVEYRA, por los
nervios, por la ansiedad, por carácter, estaba impreciso como nunca.
José DISCIACIO, desde el medio, conseguía que ante la desesperación, el equipo siga equilibrado,
los de abajo apoyaban por afuera, sobre todo con Osvaldo BARRIOS y "zaca"LEDESMA,
mostrándose siempre como salida, o en las pelotas paradas, que subían todos a buscar
la patriada.
Así llegó el descuento, rápido, en el momento justo, para inyectar de ganas y de confianza
a un equipo tocado en su amor propio. "zaca" LEDESMA logra anticiparse a su marca,
después de una pelota parada, confirmó en la red su racha goleadora.
SAVIO fue por mas, no se relajó.
Había venido mucha gente, para acompañar al equipo en los festejos de campeonato y no
se les podía fallar. Entonces los locales rabiosos, aprovecharon el momento.
Adrián "evo" LÓPEZ, el goleador, el "hijo del viento" como ahora lo llaman, apareció,
aportó su cuota goleadora, ratificó su momento y con dedicatoria a su hermano,
puso el empate, justo, esperado y necesario para que la fiesta pudiera seguir su curso.
SAVIO F.C. se encontró, apenas empezado el partido, con un pronostico de tormenta,
granizo, ciclones y huracanes, pero su jerarquía, inteligencia y mucho amor propio,
hizo que no pasara de una llovizna.
El segundo tiempo trajo los cambios y las variantes, que no alcanzaron para dar vuelta
la historia del partido. Pero esto ya era relleno.
Lo mejor estaba por llegar. La pirotecnia, la vuelta olímpica, los abrazos sinceros,
los premios y la familia de SAVIO le dieron calor, color, ruido y alegría a una tarde
tan esperada como merecida. SALUD CAMPEÓN.
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